LA SEDENA ORDENA RETIRADA!

Los 150 soldados del Ejército Mexicano que permanecían acantonados en la comunidad Tetlazinga

LEVANTAN EL CAMPAMENTO MILITAR

Pobladores de Soledad Atzompa se lo pidieron al Presidente

RAYMUNDO ESPEJO /NOTIVER / www.notiver.com.mx / Jueves 1 de marzo del 2007

Los 150 soldados del Ejército Mexicano que permanecían acantonados en la comunidad Tetlazinga, municipio de Soledad Atzompa, se retiraron de la zona por instrucciones del alto mando, sin embargo, la calma aún no llega a esa región porque los pobladores esperan la resolución sobre el.

El alcalde de Soledad Atzompa, Javier Pérez Pascuala, confirmó que los 150 soldados levantaron la base militar de Tetlazinga durante la noche del martes, “desde anoche salieron, esa fue la petición de los que se reunieron porque dicen que es un peligro para las señoras y las señoritas que viven en esta comunidad, más cuando van a la escuela”, explicó. “Fíjese, si abusaron de una anciana, imagínese a unas muchachitas, pero bueno, ayer un jefe militar pasó a informarme que se iban y ahorita ya no se encuentran en la comunidad”, reiteró.

El alcalde de Soledad Atzompa recordó que la población advirtió al jefe militar, “le dijimos que nosotros estamos esperando la resolución de cuántos elementos abusaron de la señora, pero también queremos saber qué tipo de castigo van a recibir, pues de otra manera nos manifestaremos otra vez”, precisó.

Advirtió que si no reciben respuesta en una semana sobre el avance de las investigaciones, podrían realizar más movilizaciones, “es una cuestión en la que se están solidarizando las 38 comunidades de Soledad Atzompa, en las que habitan un promedio de siete mil habitantes, con apoyo de municipios como Tequila, Xoxocotla y Ciudad Mendoza.
El edil reconoció que la gente estaba enardecida y quisieron atacar a los militares, “la gente que se reunió quería hacerse justicia por propia mano, querían linchar a los soldados, pero intervine porque como autoridad no quise que esto pasara”, comentó Pérez Pascuala.

SE LO PIDIERON AL PRESIDENTE

En un documento enviado el 27 de febrero del 2007 al presidente Felipe Calderón Hinojosa, los miembros del Ayuntamiento de Soledad Atzompa expusieron:

1. Con tristeza en nuestro corazón le informamos -por si no está informado- que el pasado domingo 25 de febrero, en la comunidad de Tetlatzinga, municipio de Soledad Atzompa, siendo las 14:00 horas, elementos del Ejército violaron tumultuariamente y causaron la muerte de nuestra hermana mayor Ernestina Ascensión Rosario.

2. Nuestro Pueblo nahua siempre ha señalado que el Ejército bajo su mando no se manda solo. Usted mismo tampoco se manda solo.

Las funciones del Ejército están reguladas por la Constitución federal que es la ley fundamental de la nación que debiera expresar la soberanía popular. Usted juró cumplir y hacer cumplir la Constitución y si no -dijo usted- que el Pueblo se lo demande.

En nuestro caso, la institución castrense hasta ahora no nos ha servido, por el contrario solo nos ha agredido, atentando contra nuestra integridad física y dignidad como persona, como humanos. Por eso demandamos y emplazamos al Ejército para que de inmediato salga de nuestro territorio y no vuelvan jamás.

A usted le demandamos que haga justicia a nuestro pueblo para que este inexplicable crimen no quede impune ni se repitan los abusos y arbitrariedades del Ejército que ya hemos denunciado.

3. El pasado 2 de febrero presentamos en el Cuartel Militar de Orizaba, un escrito de protesta en contra de las arbitrariedades cometidas por efectivos militares durante su campaña realizada el último fin de semana de enero de este mismo año.

En ese escrito demandamos una respuesta al mal comportamiento de los soldados. A 25 días de presentado ese escrito no hemos tenido respuesta.

4. ¿Puede tener alguna justificación la violación tumultuaria y muerte de nuestra hermana a manos de unos soldados?. En voz propia de un alto mando castrense nunca dijo qué es lo que busca el Ejército con su presencia en nuestro municipio, lo que si dijo es que no buscan mariguana, narcos ni armas. Solo obedecían órdenes de la SEDENA.

Reconocemos que el Gobernador del Estado tuvo la sensibilidad para apoyar con rapidez los gastos funerarios y otros apoyos económicos para los familiares. Ante miles de hermanos se comprometió a esclarecer el asesinato de nuestra hermana difunta e instruyó al Procurador de Justicia del Estado que se hicieran todas las indagatorias para esclarecer el crimen.

Le queremos aclarar que nuestro pueblo y sus autoridades municipales y comunitarias nunca nos hemos opuesto a las tareas del Ejército, solo hemos reparado cuando nos han cometido evidentes abusos y arbitrariedades. En nuestro municipio no existe delincuencia organizada pero ahora nos queda claro que no solo debemos cuidarnos de los delincuentes que vienen de fuera sino también de la policía y el Ejército.

Es usted la más alta autoridad ya instituida del Gobierno y por eso le demandamos proteja y haga justicia a nuestro Pueblo. Si las instituciones del poder ejecutivo y del poder judicial no responden a nuestra demanda de justicia nuestro Pueblo nahua recurrirá a la legítima autodefensa.

Los efectos de ese documentos fueron inmediatos, pues la misma noche del martes los soldados abandonaron Tetlazinga y parece que todo vuelve a la calma, aunque todavía falta conocer el castigo para los responsables de los lamentables hechos...