viernes, 6 de abril de 2007

¿QUE PASO EN ZONGOLICA?

ISABEL ARVIDE / LETRAS DE CAMBIO / 14 de marzo del 2007

Falta de laboratorios criminológicos y exceso de manipulación política contra la SEDENA

En una población, en verdad alejada de Dios, hubo una violación tumultaria a una anciana que después murió en el hospital con un gran descuido médico. A partir de esta realidad, tan incontrovertible como indignante, se ha montado una operación de linchamiento mediático contra el Ejército.

Cuando, a diferencia de tanto en el pasado, por primera vez el titular de la SEDENA se comprometió públicamente, de cara a las autoridades locales y a una comisión perredista de senadores y diputados a castigar con la pena máxima a los soldados acusados, si es que se prueba su responsabilidad.

Y para probar su voluntad al respecto (de la ley) el general Guillermo Galván pidió la participación de peritos federales y de la misma Comisión Nacional de Derechos Humanos.

A partir de lo cual, de esta intervención intencional y a petición de parte, se volvió a exhumar el cuerpo de la víctima.

Alrededor de esto hay un trasfondo de guerrilla, de narcotráfico, de intereses políticos y sobre todo de manipulación de medios y de organizaciones defensoras de derechos humanos.

Todo, en pocas horas, habría quedado resuelto si existiesen en nuestro país expertos en criminología y laboratorios profesionales donde la evidencia científica se impusiera sobre cualquier especulación amarillista.

A partir de la acusación de que la anciana había sido violada por soldados, que viene de una supuesta declaración de ésta antes de morir, los militares que ahí están comisionados han estado detenidos y sometidos a pruebas por parte de la autoridad estatal y de la militar.

La ecuación es muy sencilla. La señora tenía semen, que como es del conocimiento público por el auge de series televisivas que, precisamente, giran alrededor de la ciencia forense, contiene DNA. Es decir, la huella vital que cada ser humano tiene de forma única e irrepetible.

Con esto, con la identificación del DNA en el cuerpo de la difunta y la muestra de sangre, que arroja idéntico resultado, en cada uno de los soldados ya referidos (tomada en presencia de autoridades civiles) es muy fácil establecer la identidad de los violadores y si existe coincidencia con los militares.

Desafortunadamente esta prueba, que en un laboratorio norteamericano lleva pocos minutos, tomará cerca de veinte días a los expertos de la Procuraduría General de la República.

Y mientras tanto habrá un desgaste inmenso, interesado y politizado para todos. En especial para las fuerzas armadas.

Los perredistas, lo que queda de este partido político y sus diversas corrientes, tienen cuentas pendientes con los militares. Esto no es ninguna noticia nueva. Tienen también, aquí es donde entran los tiempos sexenales vigentes, un proyecto de ley que contempla un cambio drástico hacía el interior de las fuerzas armadas donde se transmitiría el mando militar a un civil y se perdería el fuero militar.

Es, precisamente, en este contexto que el linchamiento mediático presente viene a convertirse en una palanca de convencimiento social sobre dichas reformas. No hay inocencia alguna en sus expresiones públicas.

Lo cierto, que ha resultado una noticia perdida en la avalancha de descalificaciones magnificadas por el amarillismo recurrente, es que el titular de la SEDENA ha demostrado una excepcional apertura para ventilar este tema de cara a los mismos perredistas, a quienes acusan a los militares y la sociedad mexicana. Que su compromiso de una investigación imparcial y profesional está vigente con la participación de otras instancias de aplicación de justicia.

Por lo mismo habría que ponderar cualquier análisis hasta no que no quede establecida la responsabilidad de los soldados de manera inequívoca. Y entonces ver qué pasos siguen, los que en lo personal estoy cierta que será el castigo ejemplar de los culpables por parte, directa, del general Galván Galván.

Mientras tanto, nos corresponde como sociedad civil exigir al gobierno federal que tenga a bien implementar laboratorios criminales que permitan que la investigación penal se profesionalice. Esto con la urgencia que la confrontación política, que la circunstancia política exigen. No se vale que sea el Estado Mexicano, con estas injustificables ausencias, quien provoque desgastes de imagen y linchamientos políticos que en el largo plazo tienen un costo exorbitante…

www.isabelarvide.com

No hay comentarios: