jueves, 26 de abril de 2007

DELATARON EL FRAUDE


cmarin@milenio.com / www.milenio.com / Jueves 26 de abril del 2007

Los legisladores que impulsan el escalofriante cuento zongoliqueño, sobre todo las diputadas cabilderas de una vil perversidad, se reafirman como intolerantes: primero gimotearon para que José Luis Soberanes les argumentara por qué niega que hubo violación y asesinato, y a la hora de la hora reventaron su exposición.

La celada era previsible: una de las más activas promotoras del embuste, Maricela Contreras (¡encabeza la Comisión de Equidad y Género!) había confesado que lo menos que les interesaba era enterarse de qué diablos murió doña Ernestina Ascencio.

“No lo permite el formato”, arguyeron ayer los saboteadores.

Como “progresistas” cegeacheros que hace ocho años pusieron en estado de coma a la UNAM, los vividores de la memoria de la difunta “hermana mayor” sólo quieren mantener viva la llama de la fe de una demencial secta política.

Impermeables a la transparencia, chapalean en la turbiedad.

No hay comentarios: